El sistema inmunitario

El sistema inmunitario es una pieza clave de nuestra supervivencia. Se compone de una compleja red de células, órganos y tejidos que trabajan conjuntamente para proteger al organismo de las infecciones. La genética es fundamental en su funcionamiento, pero su fortaleza también está determinada por factores no hereditarios. Los microrganismos a los que nos exponemos a lo largo de la vida, así como los factores relacionados con el estilo de vida, como el estrés (libera cortisol), el sueño, la dieta y el ejercicio, influyen en el desempeño de nuestra respuesta inmune.

Clave de nuestra supervivencia

El sistema inmunitario tiene dos partes principales: el innato, que se tiene desde el nacimiento, y el adaptativo, que se adquiere cuando el cuerpo se expone a microbios o sustancias químicas. El sistema inmunitario necesita reconocer lo que no pertenece al cuerpo, indicar a las células cómo llegar al lugar del problema, atacar al invasor y eliminarlo, y saber cuándo dejar de atacar. Los anticuerpos son sustancias químicas que producen ciertos glóbulos blancos y flotan por el torrente sanguíneo para encontrar y atacar antígenos.

Complejo rompecabezas

¿Realmente es posible reforzarlo?, ¿cuáles son las estrategias realmente útiles para luchar contra las enfermedades respiratorias? Existen muchos mitos y realidades en nuestros intentos para reforzar nuestro sistema inmunitario. Sobre todo en momentos donde las enfermedades respiratorias parecen volverse más presentes, se ofrecen suplementos alimenticios que prometen reactivarlo como si se tratara de encender una lámpara, pero la verdad es que esto solo funciona como un complemento de un estilo de vida saludable. La microbiota intestinal representa uno de los elementos clave del sistema inmunológico.

Reforzarlo sin trucos