A principios del siglo XX se empezó a definir una ola de calor como un período de tres o más días en cada uno de los cuales la temperatura máxima de la sombra alcanza o supera los 90 °F.
Golpes
de calor
Este tipo de fenómenos se dan comúnmente cuando la temperatura es de forma excepcional más alta en comparación a la media en la zona, provocando efectos en la salud de la población; el más común: el golpe de calor.
El norte
del continente
Este 2023, estamos experimentando temperaturas excepcionalmente altas desde el inicio de la primavera. A mediados de mayo, gran parte de EU y Canadá estaban en medio de una racha récord.
En
carne
propia
La tercera ola de calor inició en México a principios de junio, registrando no solo temperaturas elevadas en algunos estados, sino también alertas en todo el territorio e incluso reportes de personas fallecidas.
Más allá
del horizonte
marino
Los veranos en Europa se han ido calentando desde los años 80, con olas de calor cada vez más comunes e intensas. Cada vez son más largos: duran cinco semanas más y aumentan a un ritmo de nueve días por década.
Monitoreo
científico
Usando datos sobre los cambios en física atmosférica, hidrología de la superficie terrestre y biogeoquímica oceánica, entre otros, se crean pronósticos estacionales que se ejecutan regularmente.
Al
rojo
vivo
El impacto en nuestros ecosistemas y en la población ya es evidente. Los veranos más calientes causan un mayor riesgo de incendios forestales. En lo que va del año, Jalisco ha sido uno de los más afectados por estos fenómenos.