Establecido

en 1988,

el Día Mundial del Sida fue el primer día dedicado a la salud en todo el mundo. Desde entonces las agencias de las Naciones Unidas, los Gobiernos y la sociedad civil se reúnen cada año para luchar en determinadas áreas relacionadas con el VIH.

El tema que

se busca

difundir

a partir del primero de diciembre es que el mundo puede acabar con el sida si se protegen los derechos de todas las personas. El objetivo es acabar con el sida como amenaza para la salud pública para 2030.

En México

algunos de

los estados

con las tasas de mortalidad más altas (10%) son Tabasco, Veracruz, Quintana Roo y Campeche. Son zonas de gran movilidad nacional e internacional, así como zonas de comercio sexual.

Durante el

inicio de

este año,

la Cofepris aprobó el uso de la autoprueba para la detección de VIH. Además de su venta comercial, ahora se estudia la forma de incorporarla al Sistema de Salud para favorecer diagnósticos oportunos sin estigmas.

En

Latinoamérica,

ONUSIDA

subraya el papel de Argentina, que logró disminuir la morbilidad y mortalidad del VIH/sida a partir del diagnóstico temprano, tratamiento oportuno para todos y seguimiento puntual de las personas en tratamiento para lograr una carga viral indetectable.

La profilaxis

preexposición (PrEP)

es

una forma de protegerse contra la infección por VIH y generalmente es administrada para poblaciones en riesgo. En Gran Bretaña ha logrado disminuir fuertemente tasas de contagio.

En México,

le preocupa

a los

expertos el consumo a la alza en nuestro país de fentanilo, pues eso lleva a que las drogas inyectadas se consuman ya no solo en el norte del país y que haya más contagios de enfermedades como VIH y hepatitis C.

Cuba ya no

tiene casos

de transmisión

vertical, que es la forma en que el virus de la inmunodeficiencia humana se transmite de una persona gestante a su hijo durante el embarazo, el parto y la lactancia