¿Un negocio en extinción?

Desde hace una década, la mayoría de las firmas de moda más importantes del mundo dejaron de utilizar pieles de pelaje para fabricar sus productos. La violencia a la que son sometidos los animales se mostró incompatible con la industría textil; sin embargo, su producción y uso no se ha extinguido. En Europa y China se producen casi cien millones de pieles al año, solo considerando a una de las especies más populares para este fin: el visón.

Ética, peletería y dinero

Una reciente investigación en las granjas de peleteria, revela que muchos animales criados para el consumo de pieles son susceptibles a los virus humanos, pero también existen virus entre los animales que potencialmente podrían dar el salto al organismo humano. Al principio de la pandemia de Covid-19, el SARS-CoV-2 se propagó en granjas de visones de toda Europa, donde fueron sacrificados alrededor de quince millones de animales para evitar cadenas de contagio.

Estudio revelador

Los diseños de pieles artificiales se han considerado una alternativa utilizada por muchas marcas de moda; sin embargo, los especialistas señalan que esta parte también tiene un lado oscuro, ya que existe un gran número de estudios que aseguran que el planeta no está preparado para absorber los residuos de la fabricación de pelo sintético. Es así que se están probando alternativas en los laboratorios de productos sostenibles con la apariencia buscada.

Pieles artificiales