Para observar este cuerpo celeste se recomienda posicionarse en puntos elevados, libres de la contaminación lumínica que afecta a las grandes ciudades. Aunque será posible avistarlo paralelamente al eclipse, se requiere del uso de binoculares o telescopios, ya que su presencia no será tan evidente a simple vista. De hecho, aún hay tiempo para apreciar mejor este fenómeno, ya que el 21 de abril se marca como el día clave en que el cometa brillará con mayor intensidad al alcanzar su punto más cercano al Sol en su órbita.