Modificación artificial del tiempo

La siembra de nubes se sustenta en la idea de dispersar particulas, generalmente de yoduro de plata cristalino, dentro de las nubes. Como esta sustancia tiene estructuras parecidas al hielo, atrae gotas de agua que se concentran en un núcleo alrededor de ellas y eventualmente las gotas tienen el peso suficiente para caer en forma de lluvia o nieve.

Gota tras gota

Los resultados obtenidos en experimentos científicos de siembra o bombardeo de nubes en que se introducen sustancias nucleantes durante su desarrollo sugieren resultados diversos, pero la opinión científica considera que casi siempre la evidencia física es insuficiente. No hay evidencia de que siempre funcione para incrementar la precipitación en la zona deseada.

Evidencia insuficiente

México comenzó a realizar experimentos de modificación del estado del tiempo en los años cuarenta, pero la investigación ha sido escasa a lo largo de los años; sin embargo, se ha continuado invirtiendo en estas técnicas. Los científicos dudan que realmente haya una relación costo-beneficio probada en este tipo de estartagias, pues no se miden impactos mediante una base meteorológica científica.

No es la opción contra la sequía