Energía vital

La Organización Mundial de la Salud (OMS) define la salud sexual como un estado de bienestar físico, mental y social en relación con la sexualidad; es decir, no es solamente la ausencia de enfermedad o los eventos relacionados con la reproducción humana, sino un estado integral del ser humano. Requiere un enfoque positivo y respetuoso de la sexualidad y de las relaciones sexuales, así como la posibilidad de tener experiencias sexuales placenteras y seguras, libres de toda coacción, discriminación y violencia.

¿Qué es la salud sexual?

El próximo lunes 4 de septiembre se celebra el Día Mundial de la Salud Sexual. Los especialistas hablan de los retos en salud pública en dos esferas: educación sexual y salud sexual reproductiva. En México, uno de los grandes rezagos en esta última área está ligado a una taza muy alta de embarazos adolescentes que se mantiene latente a través de los años. El tema de sexualidad y adolescencia se ha descuidado a un grado que sigue impactando la vida social y económica del país.

Doble dimensión

En los sectores más desfavorecidos no hay acceso a la información, ni a los métodos; mientras que en otros sectores también prevalece la desinformación al ser sustituida por nuevas fuentes, como las redes sociales, donde se muestra la sexualidad con conceptos ligados a la pornografía donde creencias, deseos, actitudes, roles y prácticas están permeadas por la violencia y los estereotipos misóginos. En el caso de la diversidad sexual, se mantiene el abordaje heterocentrista y sobreviven mitos que estigmarizan.

Retos