Monitoreo de hidrocarburos
Las imágenes satelitales son la primera parte de un menú de estrategias científicas para detectar un derrame de hidrocarburos en el océano y sus daños potenciales.
Derrame en situación el 16 de julio con un área densa de petróleo (dorada) de 20km2 y un área más grande de diferentes grados de concentración (plata hacia negro).
Origen
Campo Ek-Balam
Zona del derrame
Chapopotera de Cantarell
Búsqueda de evidencias de manchas de hidrocarburos que no formen parte de una emanación natural (chapopoteras).
Se determina que la mancha esté fuera de los umbrales de la normalidad de los trabajos de la industria petrolera.
Doble verificación con expertos nacionales e internacionales para cotejar magnitud del evento antes de emitir una alerta.
Se consultan diversos sistemas de información geográfica y datos sobre plataformas, tuberías y pozos para generar un mapa del derrame.
Modelación de circulación oceánica
Mediante diversas variables oceánicas como intensidad y dirección de las corrientes.
Telemetría satelital con instrumentación in situ
Mediante un sistema de telemetría satelital, se dejan boyas en el sitio del desastre.
Modelos de pronóstico
Se consideran vientos, corrientes marinas y procesos biogeoquímicos para realizar modelos que ayuden a generar pronósticos.