Preload

Beisbol:

con retrasos, vicios y sin sanciones

Estadios deportivos construidos con recursos del PMU de la Sedatu en Tabasco dan cuenta de las fallas en el desarrollo de las obras; hay demoras en 26 municipios del país.

Por Alejandra Crail

En 2021, los habitantes del municipio de Jalpa de Méndez, Tabasco, recibieron gustosos la noticia de que su estadio de beisbol, el Panorámico Manuel Vargas Izquierdo, sería remodelado. El gobierno municipal, entonces encabezado por el morenista Jesús Selván García, había anunciado que la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) transformaría el espacio en un estadio de primera. Vieron en papel un diseño novedoso, contrastante con el antiguo estadio construido en los 80 y que vio desfilar a decenas de beisbolistas tabasqueños. Se tendrían que despedir de las gradas sencillas y el techo de lámina, ya no sería necesario preocuparse por las inundaciones del campo o la ausencia de malla para proteger a los aficionados. Tendrían eso cubierto y más. La obra, según el primer contrato firmado entre la Sedatu y la empresa chiapaneca Promotora y desarrolladora clave, S.A. de C.V. quedaría lista el 16 de agosto de 2021, duraría siete meses. Pero cuando el nuevo estadio comenzaba a tomar forma, la construcción de 65.6 millones de pesos, pagada con dinero del Programa de Mejoramiento Urbano (PMU), se vino abajo.

“En un principio, vimos con agrado la decisión de tirarlo y hacer uno nuevo. Nos habían planteado una magnífica obra. Todo el pueblo estuvo de acuerdo. Pero ya cuando fuimos a ver era una calamidad. Se les cayó el techo, las gradas, tres veces”, dice Manuel Almeida, que dirige el equipo de sóftbol femenil del municipio.
Beisbol por decreto

La obra debía haberse entregado desde 2021. Al 16 de mayo de 2023, fecha en que se visitó el inmueble, éste todavía no estaba terminado.
FOTO: Diego Prado

José Inés Madrigal, jalpense que dio el salto a las ligas profesionales con los Pericos de Puebla y jugó para otros equipos del país, enumera las fallas que han detectado en los últimos dos años: no respetaron las medidas que necesita un campo profesional, el material o la inexperiencia provocaron que el techo y las gradas colapsaran, no tenía barda, colocaron una torre de metal en la zona del jardín central y no tiene buena iluminación para jugar de noche.

“En lo que menos se ocuparon fue en la nivelación del terreno para resolver el problema de inundación que arrastra el campo, no tiene buen drenaje”

El expelotero es un conocedor del Panorámico, participó en su diseño original hace cuatro décadas. Por ello asegura que, quien lo proyectó, “no es conocedor de la zona y no sabe nada de beisbol”.

Mientras la obra fue revelando sus deficiencias, la Sedatu otorgó ampliaciones de plazo a la empresa chiapaneca con quien firmó un contrato a precio alzado (el monto acordado no podrá modificarse) y por tiempo determinado. El primer retraso ocurrió porque la dependencia federal no le había dado el anticipo correspondiente a la compañía y el segundo por una suspensión temporal no especificada. La Secretaría también le otorgó más recursos por “trabajos no considerados” en el contrato original.

A marchas forzadas



Es 16 de mayo de 2023 y la obra no está lista. Alrededor del estadio las calles parecen zona de guerra: hay hoyos por todos lados, las tuberías están expuestas. Hay montículos de tierra que limitan la circulación de peatones y coches. En el campo hay máquinas excavadoras y aplanadoras. De las gradas nacen varios pilotes rojos que sostienen el techo. Un grupo de trabajadores mide la distancia entre las bases para asegurarse que esta vez el campo sí cumpla con las especificaciones profesionales, pues ya se han equivocado en el pasado. Otros más pintan de rojo los barandales. Trabajan a marchas forzadas, pues recientemente el gobierno municipal de Nuris López anunció la inauguración de este espacio: en cuatro días utilizarán la obra en las condiciones que esté.

El estadio de Jalpa de Méndez es sólo uno de los proyectos beisbolísticos que financió la Sedatu entre 2019 y 2022. No es la única obra que ha tenido retrasos y deficiencias.

Beisbol por decreto

Habitantes de Jalpa de Méndez y registros periodísticos dan cuenta de que el techo y parte de las gradas se cayeron un par de veces durante la construcción.
FOTO: Diego Prado

De los 26 municipios del país con proyectos enfocados al beisbol pagados con recursos del PMU, en 16 se retrasaron entre 5 y 21 meses, según consta en las actas entrega-recepción obtenidas vía transparencia. Algunos de ellos, pese a la entrega, fueron inaugurados mucho después o rechazados por los gobiernos municipales y estatales porque había cosas que corregir como ocurrió en Cunduacán y en Villahermosa, Tabasco.

En la mayoría de los casos, los retrasos y las fallas no han ameritado sanciones para los contratistas.

Según reportes periodísticos, en el estadio Nelson Barrera Romellón de Campeche, los trabajadores denunciaron falta de pago. En el Campo de beisbol 18 de agosto de Balancán, Tabasco, los habitantes detectaron que el campo no tenía las medidas adecuadas y protestaron para respetar las características de un campo profesional. En el Beto Ávila de Quintana Roo se tuvieron que hacer ajustes porque la comunidad se quejó de demoliciones no acordadas.

En el caso del Manuel Vargas Izquierdo, la Sedatu no emitió sanciones por retrasos, fallas en la construcción o vicios ocultos, confirmó en su respuesta a una solicitud de información.

“Sí impacta que utilicen el tema de obra pública para impulsar una pasión desmedida por el beisbol. En Tabasco vemos casas de salud y hospitales abandonados, graves problemas de inundaciones, padecemos la falta de agua potable… El gobierno federal dijo que las obras (del PMU) serían icónicas, reconocidas, pero resultaron no ser adecuadas al clima, con materiales no aptos para la humedad, con fallas en la construcción””, critica Javier Cabrera, dirigente del PRD en Tabasco, una de las pocas oposiciones que quedan en el estado.

“Todavía tiene detalles”



El 17 de marzo pasado, Román Meyer Falcón, titular de la Sedatu, publicó un video en el que aseguró que el nuevo estadio de beisbol en Cunduacán, Tabasco, está terminado.

“Ya está listo este estadio para que se pueda utilizar a la brevedad posible por ligas locales, infantiles y profesionales”

El nuevo estadio nació para suplir al 1° de Noviembre, que estaba ubicado en el centro del municipio de la zona de la Chontalpa, a 26 kilómetros de Villahermosa, y que fue demolido para dar paso a la obra de la Sedatu. Fue avalado por la entonces presidenta municipal de Morena, Nydia Naranjo Cobián y debía quedar listo en agosto de 2021.

A primera vista el estadio parece terminado. Tiene un diseño en ladrillo rojo que, según los habitantes, no suele usarse en Tabasco porque no resiste el clima, una amplia entrada para recibir a los asistentes, gradas de cemento y techos de lámina. Costó 156.6 millones de pesos y, según el contrato, también incluye una pequeña cancha de futbol 7 y la remodelación de una alberca.

Pese al anuncio del gobierno federal, el área de comunicación social del municipio que ahora encabeza el independiente, Abraham Cano, aseguró a mediados de mayo que no han recibido oficialmente la obra porque “todavía tiene detalles”.

La barda que rodea la zona del outfield, la zona de pasto alrededor de la plaza formada por las bases, se ha caído en reiteradas ocasiones, porque el estadio se consolidó a unos metros de un canal que desagua residuos líquidos del municipio. Esas bardas están chuecas, separadas entre sí, con hoyos. Por las características del terreno, el campo se encharca. El ladrillo rojo de las bancas para jugadores está enmohecido. Aún hay trabajadores en el área.

Algunas de las problemáticas de esta obra son visibles. Al interior de la construcción el ladrillo se nota enmohecido. La barda exterior comienza a enchuecarse.

Entre los archivos que entregó la Sedatu no existe acta entrega-recepción que acredite que recibió la obra del contratista o que la dependencia federal la entregó al municipio. El proyecto lleva 21 meses de retraso. Tampoco hay sanciones.

Sólo en 4 de 26 municipios, las obras beisboleras desarrolladas por medio del PMU, cuyo fin es reducir el rezago urbano y social de municipios vulnerables, la dependencia reconoce haber sancionado a los contratistas, informó en respuesta a solicitudes de información.

Castigó con 281 mil pesos a Diseño, mantenimiento y planeación, S.A. de C.V. y Desarrolladora de ideas y espacios, S.A. de C.V. por un retraso de tres meses en el nuevo estadio de beisbol de Chalco, Estado de México.

A la empresa Trailhawk, S.A. de C.V. encargada del Campo de beisbol Llano de la Cruz y el campo deportivo Cortez en Acaponeta, Nayarit, le impuso dos penas de un total de 2 mil 757 pesos. Tardaron dos meses más de la fecha estipulada.

Para el conjunto de obras que la Sedatu hizo en Cárdenas, Tabasco, incluido un estadio, aplicó una pena de 172 mil 318.98 pesos por 3 meses de retraso.

La otra fue a los constructores del estadio Nelson Barrera Romellón en Campeche. Aunque la Sedatu no reveló el monto de la sanción ni si fue aplicado a las dos constructoras, Calakmul asesores, constructores y consultores, S.A. de C.V. y Checa, S.A. de C.V. Tardaron siete meses en entregar, de acuerdo con el acta de entrega-recepción.

20 meses sin casa



Los Olmecas de Tabasco son un equipo público-privado donde el gobierno del estado es accionista mayoritario. Cuando el ahora secretario de Gobernación Adán Augusto López era gobernador, reveló que buscaba venderlo por los altos costos que representaba para las finanzas públicas. Pero en 2019, durante una gira de gobierno, el presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que el equipo se quedaría en el estado e instó al entonces gobernador a invertir en él.

Dos años después, la Sedatu respaldó el posicionamiento presidencial y designó 276.7 millones de pesos para remodelar la casa de Los Olmecas, el estadio Centenario 27 de Febrero.

Originalmente, la obra quedaría lista en diciembre de 2021 para el goce de los tabasqueños, pero como ocurrió con la mayoría de las obras beisboleras que financió la Sedatu, se retrasó. Durante 20 meses, considerando desde el inicio de la obra, Los Olmecas tuvieron que jugar en casa ajena, en Macuspana, la tierra del presidente de México.

En el acta entrega-recepción que firmó la Sedatu con el gobierno estatal se detalla que “se realizaron diversas acciones derivadas de las revisiones de la obra, hasta llegar a la conformidad de ambas partes”. Esta obra también tenía deficiencias que ni la Sedatu ni el gobierno del estado han hecho públicas. Finalmente el estado aceptó el nuevo estadio en octubre de 2022, pero fue inaugurado hasta el 1 de abril de 2023, con Adán Augusto, el promovente del proyecto y actual secretario de Gobernación, como invitado especial.

“Este estadio es una muestra más de que México tiene un presidente grande, a la altura de las circunstancias y que sabe cumplir su palabra. Esta es posiblemente la noche que más orgulloso me siento de representar al presidente de la República, en la inauguración de este monumento tabasqueño al beisbol”, dijo Adán Augusto en el evento.
beisbol por decreto

La placa nombra a los funcionarios públicos que impulsaron la remodelación del estadio Centenario 27 de Febrero con recursos del PMU.
FOTO: Diego Prado

De lo que no se habló fue del retraso de la obra y la falta de sanción al contratista ni en este ni otros proyectos beisbolísticos. Por ejemplo, las obras en el estadio de Bacalar debían terminar a finales de 2021, pero se entregaron en abril de 2022; no obstante, fue inaugurado hasta enero de 2023, 9 meses después de que presuntamente fue terminada.

El estadio Luis Anzaldo Arroyo, ubicado en Palenque, Chiapas, debía terminarse en agosto de 2021, luego obtuvo un convenio de ampliación que le dio un mes extra al contratista. Sin embargo, fue 15 meses después, en noviembre de 2022 que la Sedatu le entregó la obra al municipio, según un boletín de prensa del gobierno federal, aunque vía transparencia la Sedatu dijo no contar con el acta entrega-recepción que acredita que la obra está terminada.

Sobre el campo de beisbol 18 de agosto de Balancán, Tabasco, la información de la Sedatu muestra que las obras concluyeron el 4 de noviembre de 2021, producto de un convenio de ampliación por tres meses que le ofreció la dependencia federal al contratista sin penalización alguna. Sin embargo, reconoce que el municipio no quedó conforme y que a partir de esa fecha "se realizaron acciones derivadas de las revisiones". El municipio aceptó las obras hasta el 7 de diciembre de 2022, 16 meses después de la fecha en que la obra debió haberse concluido. La dependencia federal tampoco sancionó al contratista.

Un contrato “a precio alzado” suele ser poco conveniente en proyectos donde no hay una buena planeación de las obras, explica Mariana Campos de México Evalúa.

“Invariablemente va a haber varias sorpresas durante el desarrollo de la obra, aspectos que no se pudieron prever porque no hubo una planeación y que terminan por resolverse al momento. Esto incide en el costo final de la obra y en el tiempo de ejecución”

En el estricto sentido, señala Campos, debería haber sanciones, pero no siempre se aplican porque, usualmente, el contratista no contó a tiempo con los recursos e información para la ejecución de las obras.

“Si no se gasta para suplir las deficiencias de la obra a causa de la falta de planeación, las obras terminan siendo disfuncionales o riesgosas para la vida humana. A México le falta una Ley de Infraestructura que establezca la obligatoriedad de cumplir los pasos básicos de planeación de una obra para evitar estas fallas”

Una historia ligada al beis



En Jalpa de Méndez, a 29 kilómetros de Villahermosa, la comunidad es apasionada al béisbol. Fieles seguidores de los Butifarreros, el equipo municipal. Conocen a los jugadores, a algunos los vieron crecer. Siguen también la LMB y las Grandes Ligas. Han construido su historia de la mano de este deporte. Aquí, los retrasos y las deficiencias en la reconstrucción de su estadio, mermaron la confianza.

beisbol por decreto

Habitantes de Jalpa de Méndez desconfían de la estructura del nuevo estadio de béisbol.
FOTO: Diego Prado

El 20 de mayo, el ayuntamiento inauguró la Liga Tabasqueña de Béisbol en el Manuel Vargas Izquierdo. Habían trabajado a marchas forzadas para lograr llegar a la fecha, por eso el campo luce terroso, pues el pasto no terminó de afianzarse en el terreno. Pese a no haber tenido beisbol en los últimos 21 meses, el estadio está casi vacío. Lejos quedó el lleno total del viejo Panorámico.

Más allá de haber perdido un estadio de beisbol, perdieron un espacio comunitario que servía para realizar todo tipo de eventos. A finales de mayo, la elección de la Flor de la Jícara, un evento tradicional que solía realizarse anualmente en él, se llevó a cabo en otra área. Los habitantes dicen que hay temor de que la obra vuelva a caerse. El ayuntamiento no respondió a las múltiples solicitudes de entrevista. La Sedatu tampoco hizo comentarios.

Madrigal, el exbeisbolista que tuvo como mentor a Beto Ávila, el pelotero veracruzano que llegó a las Grandes Ligas en los 50, resume su posición sobre estos estadios:

“Ya hacía falta un proyecto de apoyo al beisbol a nivel nacional. Pero a veces es sólo la intención del que está al mando de la nave. Él maneja ciertos controles, pero hay otros que son operadores más abajo que no cumplen con el cometido”

Retrasos del proyecto beisbolístico


*Se consideró la fecha de entrega establecida en el primer contrato, no contempla convenios modificatorios.
**El tiempo de retraso se calculó en relación a las actas de entrega-recepción entregadas por la Sedatu, la ausencia de éstas o bien, la fecha oficial de inauguración. En algunos casos, aunque existe acta, la obra no ha sido plenamente aceptada por los municipios. Corte a mayo de 2023.


VIDEO: Diego Prado




#BeisbolPorDecreto

INICIO


Beisbol por decreto

VOLVER
beisbol por decreto

PRIMERA ENTREGA


Usan fondo de pobreza para remodelar estadios de beisbol

CONTINUAR
beisbol por decreto

TERCERA ENTREGA


Se necesitan escuelas y centros de salud, pero imponen estadio de beisbol

CONTINUAR
beisbol por decreto

Texto: Alejandra Crail


Video: Paola Reyes, Diego Prado y Atenea Campuzano

Fotografías: Atenea Campuzano, Alejandra Crail, Diego Prado, Presidencia, Sedatu

Edición de Video: Paola Reyes

Diseño Web: Rodrigo Romano