El Zoológico de Chapultepec ha sido el hogar de doce pandas gigantes y lucha por mantenerse como uno de los más importantes de Latinoamérica con sus más de mil ejemplares, pero los estándares mundiales de los más famosos aún son muy lejanos, sobre todo por los recursos destinados. Una institución casi de la misma edad es el Zoológico de San Diego ( 1915), que cuenta con 800 especies y ha criado a casi 200 en peligro de extinción, reintroduciendo a 50 a su hábitat natural. Aunque hay voces que claman por la desaparición de los zoológicos, los especialistas subrayan su importancia y exponen sus aportaciones en ciencia y conservación de los ecosistemas.

Inaugurado el 6 de julio de 1923 por el biólogo mexicano Alfonso Luis Herrera, el Zoológico de Chapultepec reabrió sus puertas en 1924 con una colección de 243 animales. A cien años de su surgimiento, los especialistas reflexionan sobre el papel de estas instituciones en el mundo, precursoras en investigación, educación y reproducción en cautiverio. Para especialistas en conservación de especies, como el Doctor Gerardo Ceballos, los zológicos no pueden desaparecer, pero necesitan estándares de calidad para mantener su papel en la actualidad, enfocado principalmente en la conservación y divugación del conocimiento.

Existen colecciones de animales que datan del año 2500 a. de C. Se considera al Tiergarten Schönbrunn (1752), como el más antiguo del mundo. Asentado en Viena, empezó como una colección de animales reales, símbolo de la extravagancia real austriaca. Otro de los más antiguos e importantes del mundo es el Zoológico de Londres (1828), que comenzó su vida como un Centro de Estudios Científicos con la Sociedad Zoológica de Londres. Darwin lo visitaba para perfeccionar sus teorías y después de casi dos siglos de vida se mantiene como un referente de investigación científica.