Artemis II será el primer vuelo con tripulación a bordo del sistema de exploración del espacio profundo de la NASA.
Durante su misión, de aproximadamente 10 días, cuatro astronautas confirmarán que todos los sistemas de la nave espacial funcionan según lo diseñado.
Mientras se encuentre en la órbita elíptica alrededor de la Tierra, Orion volará más allá del alcance de los GPS para verificar capacidades de comunicación de la Red de Espacio Profundo.
Finalmente crearán una figura de ocho que se extenderá a más de 230 mil millas de la Tierra antes de que Orion regrese.
Después se realizará un movimiento de propulsión llamado quemadura de inyección translunar (TLI), que enviará a la tripulación en un viaje de cuatro días a la parte trasera de la Luna.
La tripulación evaluará los sistemas necesarios para generar aire respirable y eliminar el dióxido de carbono y el vapor de agua producidos al respirar o hablar.
Los astronautas también probarán los sistemas durante los periodos de ejercicio y los periodos de sueño, donde las tasas metabólicas son las más altas y más bajas.
En lugar de requerir propulsión para el regreso se aprovechará el campo gravitatorio Tierra-Luna para que Orión sea arrastrado naturalmente.